Hoy se ha ahogado mi mirada
en un vaso de agua.
Definitivamente,
sin retorno.
He decidido que esta lágrima
sea la última de su especie.
Miro a través de mi ventana,
llueve,
ahora estoy recordando aquellos ojos y otra lluvia,
que como hoy golpeaba rabiosa el cristal.
Apuro mi café cortado…
con lágrima.
©AnaAgudo 2012